Con una longitud de treinta y tres centímetros, la grajilla, de color todo negro, con cogote y auriculares grises. Gris oscuro por debajo; ojo blanco grisáceo; pico corto; frente más pendiente que la de los demás congéneres, dándole a su cabeza un aspecto redondeado.
La grajilla se adapta como nidificante a todo tipo de huecos; por lo tanto encontramos sus colonias en variedad de paisajes: murallas, ruinas, castillos, iglesias, puentes y lugares de árboles viejos. Cría preferentemente en colonias.
Su nido lo sitúa en lugares abiertos hecho de ramitas, tapizado con lana, pelos y fibras vegetales; cuando el agujero es pequeño apenas existen ramitas; cuando el agujero es vertical, construyen el nido con gran cantidad de ramas y ramitas; el nido es construido por ambos progenitores.
La época de cría da comienzo en abril, poniendo una sola nidada.
En este nido la hembra deposita de cuatro a seis huevos. Subelípticos, lisos y brillantes; de color azul claro pálido manchado con pequeñas motas y puntos de colores: son incubados sólo por la hembra.
El polluelo nace nidícola y con plumón en la cabeza, espalda y muslos, su boca es de color púrpura y las comisuras bucales son de color amarillo pálido.
El hábitat de la grajilla lo encontramos en los parques, ciudades, ruínas, desfiladeros y bosques.
Las grajillas emigran en otoño, frecuentemente en compañía de otras grajas dirigiéndose a regiones más acogedoras.
Cría en el C y S de Europa, por el N hasta Escandinavia y N de Rusia. También en el N de África.
Es un ave muy sociable, forman grandes bandadas después de la época de cría.
KONRAD LORENZ trató en sus escritos sobre la etología comparada de los animales y el hombre.
La grajilla es omnívora; hace gran consumo de insectos y sus larvas; saltamontes y grandes coleópteros. Cuando es la época de la recolección las vemos buscando los granos caídos, también la hemos visto comer carroña de pequeño tamaño o desvalijando los huevos y pollos de los nidos de pequeños pajarillos.
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