sábado, 20 de febrero de 2010

PERIQUITO RABADILLA ROJA (Pseophotus haematonotus)



El periquito rabadilla roja -Pseophotus haematonotus- de veintiocho centímetros de longitud; en aquellos contados distritos del sureste de Australia donde afortunadamente se encuentren libres de los búhos leonados, son unas pequeñas aves agradables y vivarachas sobre todo cuando las apreciamos, el macho de color verde y su compañera de color marrón, componen una exquisita imagen al brincar por el césped. Este periquito está incluido en la especie denominada platicerca, pequeños periquitos de cola ancha; suelen reunirse en grandes bandadas en su país de origen, esta costumbre sociable la suprimen cuando son trasladados fuera de su hábitat natural; establecido en zonas de grandes praderas con agrupaciones de árboles.
Es considerado, el rabadilla roja, como mal compañero e intimida con mucha frecuencia a otros periquitos incluso de mayor tamaño.
Tiene fama de reproductor partidario de la libertad individual, procrea dos o más familias dentro de la misma temporada y frecuentemente hay que procurar que no anide demasiado tarde; en libertad su época de cría es desde agosto a diciembre. Sitúa su nido en el hueco de un árbol donde deposita la hembra de cuatro a siete huevos que son incubados durante veinte días, solamente por ésta, siendo alimentada por el macho que le ayuda a cuidar los polluelos pero una vez que estos abandonan el nido son perseguidos por el padre, debido a esta incorregible actitud se aconseja a los criadores apartar a las crías en el momento que se observa la menor muestra de acoso.
El macho adulto tiene una coloración donde predomina el color verde, con varias tonalidades y por supuesto su rabadilla de color rojo intenso; la hembra como antes manifesté, es de color marrón grisáceo, teñido de verde.
En esta especie existen dos subespecies y algunas mutaciones azules y amarillas, tengo conocimiento de que este periquito ha producido híbridos al cruce con los periquitos birrete azul y encapuchado, no he tenido la fortuna de apreciarlos, pero, el cruce con el rosella, sí los he visto, y aunque no soy partidario de quitarle "personalidad" a estos psitácidos mezclando especies que dan claros mosaicos de colores, no dejo de reconocer que como en este caso, el cruce con el rosella llama la atención. Su alimentación en cautividad está basada en pipas de girasol, manzanas y zanahorias. Finalmente diré que es una especie fácil de criar.

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