Los túneles: Esta idea apareció a nivel de ejecución el día 23 de diciembre de 1774; después de que el ejército del Sultán comprobó la falta de confianza depositada en el proyecto del bombardeo. El diario se centró en los trabajos de excavación contra los fuertes exteriores, principalmente en los fuertes Victoria grande , Rosario, San Miguel, Santa Lucía y Santa Bárbara; es decir, en los fuertes del Cuarto Recinto como era llamado por los españoles. En cuanto al fuerte Victoria grande, era el más poderoso de ellos y el más peligroso, habiendo concentrado el esfuerzo en la excavación de trincheras a su alrededor; temiendo la llegada al fuerte a través de las excavaciones internas, desde las posiciones de Puntilla y del ejercito sitiador.
(El fuerte Victoria grande, está situado en una peña al norte de la fortaleza. Fue construido en el año 1735, con aspecto y forma triangular y, su superficie tiene una capacidad para dieciocho piezas de artillería, éste fue un gran proyecto que queda reflejado en su nombre).
El comienzo de la primera excavación del túnel se sabe que fue el día 23 de diciembre de 1774; Caballero hace mención de ello, en un dibujo que realizó el día 2 de febrero; en dicho dibujo esta primera excavación se encontraba alejada del fuerte a una distancia de 165 metros y 35 centímetros. La excavación de la primera sección se terminó el día 31 de diciembre, con el avance de una distancia de 27 metros; parece ser que no les impresionó la explosión a la que se expuso el día 29 del mismo mes.
Los españoles se prepararon para detener los trabajos de excavación ejecutando una operación general terrestre marítima contra las posiciones de Puntilla, los días 8 y 9 de enero.
Sin embargo, el plan no impidió la actividad de los sitiadores que avanzaron en una proporción más fuerte, preparando la voladura de una mina contra el túnel español que se extendía en dirección al túnel enemigo, y eso sucedió el día 16 de enero; sin embargo, la superficie destruida era muy pequeña. El diario nos informó que los españoles habían mejorado en la excavación, y el día 19 de enero se aproximaron a la vanguardia del túnel enemigo, y el resultado no apareció hasta un día después; mientras los españoles explosionaron la mina que habían dispuesto para interrumpir el camino a los sitiadores, y a causa de esto tuvo lugar la matanza de un gran número de excavadores; debido a este hecho el Sultán Sidi Mohamed ben Abdellah hizo una rápida visita al lugar y después de lo que vio se indignó mucho contra el general Aomar Al Kituni. (Este hecho tuvo lugar el día 1 de febrero).
Existe un dibujo de la guerra de los túneles en el cual se alude al lugar de la explosión con la letra (a) no apareciendo ningún progreso en el avance de este túnel después de este hecho, por o cual lo sitiadores se vieron en la imposibilidad de continuar en esa dirección.
La existencia de otro túnel del cual el diario no da muchas explicaciones, acerca de él, pero que se tiene conocimiento de que los sitiadores empezaron la excavación desde la barricada de Puntilla extendiéndose en dirección suroeste; quizá con el objeto de llegar a los canales de los túneles españoles que estaban ramificados aquí desde el fuerte Victoria entre los puntos (f) y (g) y parece que los españoles acordaron dirigir sus excavaciones al tiempo que explosionaron una mina en el punto (b) el día 1 de febrero.
Otra operación de la que se tuvo conocimiento en esta parte del túnel de los sitiadores es la voladura por los mismos de cuatro minas en el mismo lugar, sin duda para el asalto sobre todo desde allí. Es importante que la excavación de los sitiadores no pasó el límite, después de la visible interrupción durante los días 5 y 6 de febrero; especialmente después de los que tuvieron conocimiento las fuerzas del Sultán de la excavación de los españoles frente a ellos el día 7 de enero.
Se supo de la existencia de otro túnel enemigo que era el objetivo de ellos por la llegada al fuerte Rosario que dio comienzo el día 30 de diciembre.
(El fuerte Rosario, es el primero de los fuertes exteriores en dirección norte que lo defiende un acantilado saliente sobre el mar con un borde de forma vertical, llamado por los españoles con el nombre de Cortadura).
Los observadores manifestaron que ellos lo descubrieron a una distancia de 50 metros; pero Caballero no lo indicó en el dibujo por lo cual aparece como un insignificante interés militar.
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