Día 20 de enero
La fortaleza en este día disparó varios cañonazos de salutación por el nacimiento de Su Majestad el Rey, el estruendo de los 84 y 81 cañonazos llegaron hasta el enemigo.
El soplón estuvo esta noche en la fortaleza, y entre las noticias que se ignoraba se dijo que los enemigos empezaron a excavar otra zanja, y ellos dicidieron ese plan para la destrucción del fuerte Santa Lucía. (64)
Esta noticia nos hizo ir de prisa a la abertura del nuevo túnel custodiado por nuestro fuerte a distancia y profundidad conveniente, garantizando la eliminación del mencionado peligro que amenaza al fuerte; sin embargo, es posible el avance partiendo de aquel túnel (si hubiera tiempo suficiente), por medio de un trazado canal ramificado apoyado por una mina que se coloca en dirección, al punto que notamos un descubrimiento real para la excavación; después de la explosión de la mina nos dirigimos al punto más lejano posible.
Sin que esta influyera en el resto de las excavaciones extendidas en dirección a Puntilla para obstaculizar el progreso de los enemigos empeñados en llegar a esa dirección. (65) Desde la mañana de este día vimos el traslado de los campamentos enemigos desde donde habían sido establecidos al comienzo del asedio hasta el monte Karmud, uno de los picos del monte Gurugú.
(64).- "El enemigo nos lanzó las granadas de sus morteros, los cuales ocasionaron algunas pérdidas en la fortaleza.
Se observa que ellos se ocuparon de la excavación de una trinchera que se extiende desde el lugar de la reciente explosión en dirección al túnel que se encuentra frente al fuerte de santa lucía. La trinchera es la tercera de las trincheras dirigida contra el fuerte Victoria de forma paralela".
(65).- Miranda añade: observamos desde la mañana de este día el traslado de los campamentos enemigos, desde sus lugares establecidos desde el comienzo de este asedio, hacia el monte Kurmud a una distancia de 200 tuisas (333,6 metros).
Día 21
Los enemigos durante la pasada noche avanzaron ocupando una extensión de 5 metros de la posición de la explosión anterior marchando en dirección al fuerte Santa Lucía; sin embargo, los fuertes Victoria y Rosario obstaculizaron sus esfuerzos disparando con los fusiles causándoles la muerte a alguno de los hombres de ellos.
Durante esta noche continuó el bombardeo con el lanzamiento de 102 granadas y 51 cañonazos. La fortaleza respondió empleando con superioridad los nuevos cañones traídos para nosotros anteriormente desde Cádiz, y a pesar de la detonación, el primero de los disparos era del calibre 24 pulgadas; los disparos de nuestros cañones obligaron al Sultán a alejar su campamento a una distancia de 125 metros de la posición en que antes se encontraban. Nuestro principal interés era acaparar la atención y tomar las precauciones necesarias y la ocupación de los túneles.
Día 22
El campamento enemigo siguió lanzando sobre la fortaleza 72 granadas y 46 balas de cañón. Por nuestra parte los rechazamos de igual modo que ayer, por esta causa retrocedieron el campamento real hacia una nueva posición elegida por el Sultán desde ayer. Asimismo, trasladaron el resto de los campamentos y las baterías de la posición de Puntilla, que se terminó su construcción, lejos, detrás del fuerte de San Francisco. (66)
En este día el puesto de información informó que vio, aproximadamente, a miles de jinetes que abandonaron el campamento; estos jinetes se dirigieron hacia nosotros por primera vez, no llegando a comprender la causa de este motivo. En otra dirección se terminó la operación de cargar la mina mayor avanzando en dirección a Puntilla, por orden del gobernador y del general.
(66).-"El enemigo paró toda actividad, incluso, la de sus baterías, esta era la primera vez que no se dispara sobre nosotros ni un solo disparo desde el comienzo del asedio; sin embargo, durante la noche se encendieron fuegos en los alrededores del fuerte Rosario.
Día 23
La mañana se eclipsó debido a las fuertes lluvias y al fortísimo viento, y por esta causa el enemigo apenas utilizó sus morteros y cañones igual que lo hizo la fortaleza, y así el retumbar fue imperceptible.
Se continua con la excavación de los túneles con el mismo entusiasmo e interés. Noticias del control observaron la salida de aproximadamente 400 jinetes del campamento siguiendo las huellas de la caballería mora según lo hicieron ayer. (67)
(67).- "Los moros intentaron encender fuego en los alrededores de Santa Bárbara, sin conseguirlo de ninguna manera. Durante la noche nos arrojaron grupos de treinta granadas deprimiendo a nuestros hombres. Y siempre que intentaban refugiarse de este tipo de bombardeo les era imposible de estar seguro de escapar de la actividad de las granadas debido a la estrechez de las calles de la fortaleza.
Por algunos informadores tuvimos conocimiento de la muerte del jefe de la artillería enemiga. Y al mismo tiempo la muerte de uno de los hombres del Emir.
El espía que vino a la fortaleza, informó que el número de muertos resultante de la explosión de la mina de Puntilla, el día 29 del pasado mes, alcanzó a 50 muertos.
El mismo informante añadió que los moros se encontraban preocupados en la fabricación de un número grande de escaleras preparando la posibilidad de organizar un ataque general sobre este fuerte, pero luego dejaron el proyecto para el día 10 del próximo mes".
Por el informe de un jefe militar español se supo que los últimos días les llegó a los moros nuevos refuerzos. (Gaceta de Madrid en su número del 24 de enero de 1775).
Día 24
La duración del violento viento durante esta semana, tuvo como resultado el mejoramiento de la atmósfera. El enemigo disparó sobre nosotros cinco disparos de artillería durante el día, y durante la noche nos arrojó 10 proyectiles; la fortaleza contestó con moderación, poniendo su atención en otras ocupaciones. (68)
(68).- Estuvimos pendiente de la visita de inspección que realizó el Sultán al campamento y a las trincheras, después de algunos cañonazos y con respecto a las posiciones de nuestras baterías, en compañía de un cortejo de jinetes observadores.
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