Una guerra adicional al asedio de Melilla por parte del ejército del Sultán, fue la de los túneles y las trincheras.
Las fuerzas del Sultán, llevaron a cabo un excesivo esfuerzo de sacrificio para llegar a la destrucción de los fuertes a través de la ampliación de los conductos de los túneles.
La utilización de los túneles no era un proyecto moderno, en cuanto a su empleo, ya que en algunos escritos árabes se habla de su utilización, durante el asedio por parte del ejército moro correspondiente al año 1768. Ya que los hombres de Kelaia lo habían practicado durante la presión de los guerreros de la familia Al Kitunia sobre Melilla para asfixiarla, en las épocas de Mulay Rachid y Mula Ismael.
Con este proyecto de la destrucción de los fuertes, España, sufrió daño en la totalidad de ellos que anteriormente habían sido construídos a finales del siglo XVI con un número de posiciones en el río Mudur, (actual río de Oro) las alturas de Puntilla y Horcas.
La idea de volver al proyecto de la destrucción de los fuertes por medio de los túneles se debía al general Aomar ben Aomar ben Mohamed Al Kituni, y el resultado de ese esfuerzo llegó a Mohamed que había sido el que recibió el encargo del Sultán para que llevara a cabo el proyecto; quizá con el apoyo de que se llama en el diario, Sidi Butib o Botey.
Debido a la dificultad de este proyecto el general Aomar permaneció en su campamento en dirección a Puntilla planeando aquella operación.
No se tiene ninguna referencia acerca de los responsables de las excavaciones de los túneles, pero existe la sospecha de que éstos fueran mercenarios y oriundos de esta región; y según Caballero, les habían adiestrado y especializado en excavaciones y que la mayoría de ellos eran cabecillas.
El diario menciona que el salario de los excavadores eran de tres mauzunas, (moneda de bronce) para cada excavador. Estos trabajos de excavación se puede muy bien clasificar en dos clases: la excavación de los túneles y de las trincheras.
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario