LA REBELDIA RIFEÑA (continuación)

Los responsables rifeños que se dirigieron al
enviado de la administración francesa, alcanzaron sus deseos en la solución del problema por caminos pacíficos e improvisaron una apertura de negociaciones en este asunto, y después de eso el enviado regresó por dos veces al Rif para llevar a Ben Abdelkrim la proposición francesa con el envío de un mensajero oficial de Fes. Esto es lo que se llevó a cabo de hecho el día 9 de mayo de 1924, fecha de la llegada de Ali ben Hud, más conocido por el nombre de Aluche a Fes, para explicar la posición del mando de la resistencia sobre el proyecto francés, y que queda resumido en dos puntos:

A.- El mando rifeño reclama a los franceses su oferta de completar las explicaciones ante el intento de la ejecución del proyecto del avance hacia las alturas del norte.

B.- Se aludió acerca de su preparación para la retirada de las zonas que dependen de las zonas de influencia francesa, el tiempo suficiente para la satisfacción de las cabilas debido a la necesidad de respetar sus decisiones y se terminen sus obstáculos y problemas para que vuelva el daño a la popularidad de Mohamed ben Abdelkrim ben Al Jatabi en la zona.

Sin embargo, las autoridades francesas que insistían sobre la aplicación de su proyecto a corto plazo, no consideraban sino el tiempo adecuado, para realizarlo sin un enfrentamiento directo con los guerreros rifeños.

Y se aprovechó una ocasión, el estallido de la batalla entre españoles y rifeños en el frente oriental y por el control de la zona de Tarfesit, que condujo a la incorporación de un abundante grupo de guerreros en sus cabilas para una concentración en la operación del avance de sus fuerzas en dirección a los puntos estratégicos. Por eso sobre la vuelta del enviado rifeño a Fes para informar a las autoridades colonialistas el desmentido oficial a la oposición de que las fuerzas colonialistas realizaban su avance por etapas.

Entonces, aparece a través de su recuerdo, que la iniciativa francesa para la entrada en comunicación directa con Mohamed ben Abelkrim, no fueron el objetivo de ella llegar a un pacto que compense a las dos partes -no fue una operación táctica pura, para la transformación de las opimiones acerca de los objetivos colonialistas auténticos.

De lo contrario ¿Cómo se explica que la aplicación de un proyecto fueron las negociaciones, que comenzó con su relación con el mando de la ressitencia?

La cabila de Beni Zerual es la causa directa del estallido del enfrentamiento francés-rifeño:

Después que las autoridades colonialistas tuvieron el valor de aplicar una parte de su proyecto de expansionismo, se precipitaron las condiciones y se dio comienzo a los trámites de la relación, mejor dicho a la mutua comprensión entre las dos partes, por medio de errores. Por eso a partir del mes de junio y, durante los meses de julio y agosto de 1924, se presenció unos intensos encuentros entre las cabilas opuestas a las posiciones francesas, reforzadas por fuerzas rifeñas enviadas al lugar. Pero las dos partes aspiraban sin embargo a que quedaran limitadas el tiempo y el lugar como dos causas principales.

En primer lugar: Lyautey no fue el que llegó con la ayuda militar necesaria para la entrada en un enfrentamiento directo con el motivo de la resistencia rifeña.

En segundo lugar. El líder rifeño estaba contento de finalizar el enfrentamiento, por eso de antemano aspiraba a dar por finalizada la lucha militar contra los españoles antes de llegar al enfrentamiento directo contra una fuerza colonialista progresiva y una fuerza de España. A eso hay que añadirle el problema fronterizo entre las dos zonas de penetración; la francesa y la española, y más exactamente se le denomina "b" al problema de Beni Zerual, que fue la causa directa que dio lugar al estallido de la guerra rifeña-francesa en abril de 1925, pués los franceses tuvieron numerosos e importantes aliados representados en la persona del noble Abderrahaman Darkaui, que participó de forma eficaz con las autoridades francesas en diferentes etapas del dominio militar en la zona del Uarga y apoyó el alejamiento de todas las tentativas que realizó el líder rifeño, y especialmente en las fronteras a finales de 1923.

Pero los desarrollos que siguieron a la ocupación de los puntos estratégicos -27 mayo de 1924-, demostraron en concreto que los franceses fueron perseverantes con su reunión en un lugar de Beni Zerual (los hijos de Kasem) en septiembre de 1924, y por consiguiente la corriente de oposición a la presencia francesa llegó a ser regular, y más eficaz en sus movimientos y repulsa a las situaciones distendidas por el ilustre Darkaui que, cuando sintió el amenazador peligro, recurrió a su retiro en Anjout.

¿Cuál es la importancia que tiene, la cabila de Beni Zerual en relación con los asuntos franceses?.

- Ciertamente sus poderes sobre la cabila influyeron para prohibir cualquier contacto con la resistencia en el frente occidental (Beni Mustara y Gazaua) y en dirección oriental (Marnisa y Gazauia) que les permitiera una ayuda y una protección de un antiguo aliado que fue para la administración francesa el ilustre Darkaui. Las autoridades francesas, y a su frente Lyautey, prestaron atención a los positivos signos, que apuntaban la retirada española de numerosas zonas, la moral de los hombres de la resistencia rifeña, y por la popularidad de Abdelkrim en diferentes cabilas.

El prestigio de Abdelkrim es grande dentro de las formidables proporciones, él es el centro de atracción nacionalista...

Lyautey envió numerosos informes. En ellos recuerda esta afirmación que se reforzará mucho cuando finalice el año 1924.

-Ciertamente el convenio del 27 de abril de 1912, terminó con los problemas fronterizos en las dos zonas de influencia francesa y española, y la cabina de Beni Zerual penetra en el interior de las zonas que son discutidas por las fuerzas colonialistas. Y Francia vio que la cabila penetró en el interior de su zona de influencia.

Y en cuanto a España estuvieron reclamando su derecho sobre la mayor parte de la cabila.

Este hecho sucedió por toda su torpeza sobre las relaciones francesas rifeñas. Y en diciembre de 1924, Lyautey envió un minucioso informe al gobierno sobre el desarrollo de las circunstancias, especialmente después de la retirada española, y durante su información citó a la cabila de Beni Zerual, y en su resumen declaró su apoyo a la resistencia rifeña.

Asimismo, al gobierno le llamó la atención que Abdelkrim estuviera más persistente que en cualquier tiempo pasado, sobre la resistencia a cualquier avance de la fuerzas francesas en dirección norte; y su audacia por la instalación de posiciones defensivas al norte de Fes y su envío para mejor equipar a sus fuerzas con las ametralladoras en la zona.

Pero las autoridades francesas, sin embargo, veían que la ocupación militar de esta cabila se consideraba una orden vital, para que esta se constituya en una base necesaria para una garantía de éxito de las actividades políticas con los notables de las cabilas, al objeto de desmontar el apoyo político al poder de Abdelkrim.

En el año 1925, se repitió el mismo guión del pasado año (1924), cuando las autoridades francesas trabajan enviando a Axdir el 18 de marzo de 1925, a Abdelaziz Lahlu, para confirmar la vinculación de la cabila de Beni Zerual a la influencia francesa. Después al mando de la resistencia se le ocurrió enviar al caid Hadu ben Hamu a Taurit, para informar al interventor civil Gabrielle de sus proposiciones al juez de la comisión conjunta: francesa rifeña, para resolver el problema de las fronteras francesa española. Sin embargo, las autoridades francesas rechazaron la difusión de este problema en ausencia de España.

El mando rifeño y su líder Abdelkrim necesitan la confirmación ya que había comprendido bien la lección del año pasado, es decir, cuando la administración francesa se posesionó ante el hecho consumado de la ocupación militar de las zonas estratégicas y no tuvieron preparados para la evacuación de la cabila de Beni Zerual mirando a su importancia estratégica, económica y política. Ante estos desarrollos, se dio la orden a tres movimientos rifeños y montañez para la preparación del enfrentamiento en las fronteras de las cabilas del Uarga, hecho este que dio lugar al estallido de la guerra francesa rifeña, el día 13 de abril de 1925.

"La iniciativa de los gobiernos colonialistas para abrir las negociaciones directas con los representantes de la resistencia rifeña, medió en los círculos estratégicos de un juzgado para la condena del Movimiento de Mohamed ben Abdelkrim ben Al Jatabi".