LOS NIDOS (segunda parte)

Existen aves que construyen nidos poco comunes y no exentos de admiración.

A pesar de que una gran mayoría de pájaros tropicales utilizan las telarañas para construir sus nidos, en la zona europea el uso del producto de este arácnido está sólo limitado a las aves que utilizan el musgo y el liquen para construir sus nidos y necesitan este material para atarlo, entre estas aves están el pinzón, el buitrón y los zarceros.

Algunas especies de nuestra zona, pocas, hacen sus nidos colgantes concretamente me voy a referir al nido del pájaro moscón.

Este pequeño pájaro de unos once centímetros de longitud construye uno de los nidos más primorosos de cuantos construyen las aves europeas, exceptuando a los pájaros moscones tropicales que hacen aún más complicado sus nidos, pues colocan una especie de puerta de entrada del mismo. El pájaro moscón europeo da comienzo a la construcción de su nido colgando unas cuantas fibras y después construyen una bolsa y un tubo lateral, atando al extremo de una ramita colgante largas fibras un trozo de lana basta la une a este formando un lazo colgante, el aire hace de este trozo de borra una estructura esponjosa que más tarde el diminuto pájaro teje con rápidos movimientos del pico formando una bolsa y lo finaliza con un largo tubo de entrada en la parte superior. El material de las paredes es fuerte y, éstas son gruesas, formadas de partes pelosas de plantas y fibras.

otro de los nidos colgantes es el que efectúa la maravillosa oropéndola, que construye la taza del nido con unas largas tiras que va pasando por encima y por debajo de las ramas que forman la horquilla y construye dentro de su estructura, quedando el nido suspendido y atado a las ramas por sus bordes; tapizado con materiales más suave, lana, papel y espigas.

Existen también dos nectáridos, mal llamados colibríes, que construyen el nido colgante atándolo a una rama mediante una masa de fibras y telarañas.

Otras aves utilizan en la construcción de sus nidos, el barro, aves tan diferentes como la corneja y la cigüeña incorporan barro a sus nidos para fortalecerlos; otro como el trepador rupestre utiliza el barro para cegar la entrada del hueco natural en la roca dejándola a su medida.

los zorzales forman una capa de barro entre el exterior del nido y el tapizado interior, estos nidos tienen una estructura tan sólida que durante muchos años se conservan en perfectas condiciones.

La familia de hirundinos a las cuales pertenecen la golondrina y el avión, construyen sus nidos con barro que aglutinan con saliva, estos nidos pueden estar pegados en superficies verticales siempre que estas estén resguardadas de la lluvia.

Las aves siempre que se cumplan ciertas condiciones pueden utilizar materiales fabricados por el hombre, que a nosotros nos pueden parecer inverosímiles, como son trozos de alambre que se parezcan a ramitas flexibles, así como harapos y papeles que a su vez son sustitutos de las hojas secas.

Me viene a la memoria los versos de Rafael Alberti:

Leñador

no tales el pino,

que un hogar

hay dormido

en su copa.

Señora abubilla,

señor gorrión,

hermana mía calandria,

sobrina del ruiseñor

Ave sin cola,

martín-pescador,

parado y triste alcaraván.