El linaje de su madre está entroncado con el del padre, ella es: Amina bent Uhabi bent Abdelmanaf bent Zuhra bent Kilab bent Murra.
En una de las ramas de su árbol genealógico se encuentra Abdellah ben Abdelmutalib.
LOS HIJOS DEL SACRIFICIO.
Los hijos del sacrificio son: Ismael ben Ibrahim, y Abdellah ben Abdelmutaleb.
La leyenda de Ismael la encontramos en el Noble Corán, en las aleyas 100 a 110 del sura de Los que se ponen en fila.
Estas aleyas o versículos dicen lo siguiente:
¡Señor mío! Concédeme una descendencia de justos.
Y le anunciamos un niño que habría de tener buen juicio.
Y cuando éste alcanzó la edad de acompañarle en sus tareas le dijo Ibrahim: ¡Hijo mío! He visto en sueños que te sacrificaba; considera tu parecer. Dijo: ¡Padre! Haz lo que se te ordena y si Dios quiere, encontrarás en mí a uno de los pacientes.
Y cuando ambos lo habían aceptado con sumisión, lo tumbó boca abajo.
Le gritamos: ¡Ibrahim!
Ya has confirmado la visión que tuvistes.
Realmente así es como recompensamos a los que hacen el bien.
Esta es, de verdad, la prueba evidente.
Y lo rescatamos poniendo en su lugar una magnífica ofrenda (un hermoso carnero del que se dice era del Jardín).
Y dejamos su memoria para la posteridad.
Paz para Ibrahim.
Así es como recompensamos a los que hacen el bien.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario