jueves, 27 de enero de 2011

ANÁTIDAS 2ª parte



Una vez reflejado -someramente- alguna de las características de las anátidas, expondré vida, costumbres y reproducción de alguna de estas.
El ánade real es el pato más familiar y abundante de la Tierra, siendo además el antepasado de los patos domésticos.
El macho tiene la cabeza de color verde lustroso con un estrecho collar blanco, el pecho castaño purpúreo y su cuerpo es gris. Posee una cola blanca con las plumas centrales rizadas y el pico amarillento.
la hembra ausente de rasgos característicos, es de color pardo. Cuando vuelan se observa que el espejuelo alar, tanto en el macho como en la hembra, es de color violeta púrpura situado entre dos barras blancas.
Algunas aves domésticas tienen un parecido bastante semejante a su antepasado el ánade real, debido al frecuente entrecruzamiento con los ánades reales salvajes, aunque también es cierto que en esta semejanza se deben exceptuar algunas manchas distintivas de color blanco y, su aspecto de ave bien alimentada, así como su afición y apego a la tierra.
Suele anidar bajo la maleza cerca de cualquier lugar donde exista agua dulce, situando su nido, normalmente, en el suelo, aunque a veces los depositan -sus huevos- en agujeros.
Por término medio ponen de diez a doce huevos, que son incubados sólo por la hembra durante aproximadamente unos veintiocho días; al final de los cuales nacen las crías que son nidífugas -es decir- nacen cubiertas de plumón y muy pronto se encuentran en condiciones de poder abandonar el nido y valerse por si misma.
Los gansos son aves grandes y rechonchas, con el cuello algo más largo que la mayoría de los patos, y que están en posesión de unas patas comparativamente cortas.
A diferencia de los patos, en los gansos y cisnes tanto el macho como la hembra son semejantes en cuanto a su coloración, es decir, no son dimorficos, distingüiéndose unos de otros por su volumen. El ánsar común es el más grande de todos los gansos grises con una longitud que oscila entre setenta y seis y ochenta y nueve cm., con la cabeza del mismo color que el cuerpo, pico grande de color naranja en la especie occidental y rosa en la oriental.
El ánsar común, cuyo nombre científico es Anser anser, es el antepasado del ganso doméstico; observando que el cuerpo del ganso salvaje es más estilizado que el del doméstico, probablemente debido a que este último lleva una vida sedentaria y está mejor alimentado.
Su voz es semejante a la del doméstico, emitiendo un clamoroso "aang aang aang", así como notas siseantes cuando se le molesta. Este ánsar común estaba muy extendido en Europa, pero debido a su caza indiscriminada y, al paulatino aumento de degradación de su hábitat, ha dado como resultado que en la actualidad su área de distribución haya quedado muy reducida.
En Italia y Cataluña, denominan a los ánsares con el nombre de ocas; me viene ahora a la memoria, "la leyenda de las famosas ocas de Campidoglio, que como se sabe salvaron a la antigua Roma durante las incursiones de los galos". El lector puede denominar a los ánsares con el nombre que tenga por costumbre, sin por ello incurrir en ningún error, pues ocas, gooses, gansos u oies, todas son denominaciones correctas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario