ALCAUDÓN CHICO (Lanius minor)

Aunque menor -veinte centímetros- es parecido al Real con alas más largas, cola más corta y pico rechoncho. Su frente es negra, sin lista superciliar blanca sobre el antifaz negro. El dorso y el obispillo son grises; ala negra con una ancha franja blanca, la cola es negra con rectrices externas blancas y conspicuas.

El alcaudón chico es habitante de los terrenos abiertos con grandes árboles o grupos de árboles diseminados; en los árboles que bordean las alamedas, en graneros y cobertizos en medio del campo. El alcaudón chico tiene preferencia por los árboles de hojas caducas, aunque de vez en cuando se les ha visto anidar en alguna conífera.

Establece su nido, casi siempre, en un árbol muy alto, frecuentemente utiliza un álamo. Es un nido bastante abultado, construido con ramitas, raíces, gruesas hierbas, y su interior está cómodamente tapizado con un agradable y mullido colchón de plumas.

Existe un signo característico que nos permite reconocer, sin ninguna duda, el nido del alcaudón chico, y no es otro que las hojas frescas que están entrelazadas en la capa media del nido en una cantidad bastante considerable.

La época de cría da comienzo a mediados del mes de mayo, una sola nidada. En el nido la hembra deposita de cinco a seis huevos. Subelípticos, lisos y brillantes; de color verde pálido, marcado con manchas y pequeñas motas.

La alimentación, es excesivamente animal, semejante al alcaudón dorsirrostro pero al contrario que los demás alcaudones, éste sólo rara vez empala a sus presas y no tiende a formar despensas.