El combatiente, durante la mayor parte del año es una zancuda sin ninguna característica distintiva; pero con la llegada del verano, el macho se transforma presentando un crecimiento extraordinario de las plumas que rodean el cuello y la cabeza, incluyendo la gorguera y, luciendo dos moños de plumas eréctiles en la nuca. La cara se vuelve desnuda de color amarillo rojizo. Los ornamentos plumosos varían del color blanco al pardo o del abigarrado al negro.
Tiene un pico tosco y ligeramente curvado.
Habita la tundra, las praderas, los márgenes de los lagos y marjales de tierra adentro.
El nombre de combatiente le viene por la realización, en la arena, de combates simulados para establecer el derecho a aparearse y definir su soberanía.
Se distribuye por todo el norte del paleártico, criando en todo el norte de Europa. En la península ibérica, el combatiente aparece fundamentalmente en la época de paso y también en las islas Baleares, existen individuos que permanecen invernantes en tierras del interior.
Nidifica en el suelo oculto entre la hierba donde es suficientemente alta; en este nido la hembra deposita cuatro huevos de figura oval a piriforme, lisos y ligeramente brillantes. De color oliva con manchas y motas pequeñas: el polluelo nace nidífugo y con plumón.
Se alimenta de gusanos, caracoles e insectos; también consume bayas y semillas.
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